• Sitio web para conocer la vida y la obra de nuestro fundador el Siervo de Dios Luis María Etcheverry Boneo: www.etcheverryboneo.org

EucaristiaLuis María Etcheverry Boneo nació en Buenos Aires el 18 de Septiembre de 1917, en el seno de una familia profundamente cristiana.

A los 12 años plantea el tema de su vocación, pero se le aconseja esperar a concluir los estudios secundarios, los cuales finaliza en el Colegio Champagnat.

El 19 de marzo de 1936 ingresa al Seminario de Buenos Aires. El mismo año es enviado a Roma por el Sr. Arzobispo para realizar allí sus estudios eclesiásticos en la Pontificia Universidad Gregoriana.

Desde los comienzos de sus estudios en Roma -durante el pontificado de Pio XI-, se interesa por el tema de la formación y de la cultura cristiana. El 12 de abril de 1941 es ordenado sacerdote en la capilla del Colegio Pío Latino Americano y su valoración de la gracia es tan grande que escribe a su familia diciendo que su vida ha llegado a ser un “ poema divino ”. La gloria de Dios como fin último de todo lo creado; Jesucristo, centro del universo y del ser y obrar humanos; la cultura como continuación de la Encarnación son líneas maestras que conforman su entrega sacerdotal.

Con motivo de la segunda Guerra mundial, debe regresar a Buenos Aires (1943), interrumpiendo sus estudios de doctorado. En la diócesis se le encomiendan distintas tareas eclesiales, entre las que podemos mencionar la parroquia de Nuestra Señora de Monserrat (1944-1949), la Acción Católica (1944-1945), la capellanía del Colegio Nuestra Señora de la Misericordia de Belgrano (1944-1949), obras donde deja siempre su impronta de formador.

La Iglesia le confía rápidamente las obras intelectuales de la Arquidiócesis y lo delega para representarla en congresos nacionales e internacionales. Fue profesor en el Seminario Metropolitano y director de los Cursos de Cultura Católica y del Pontificio Instituto Católico de Cultura. Durante casi diez años fue el principal gestor de la fundación de la Universidad Católica Argentina “Santa María de los Buenos Aires”(1958), donde ocupó los cargos de Secretario General y de Director del Instituto de Ciencias de la Cultura hasta 1961.

El Padre Luis extendió su celo pastoral a otras múltiples iniciativas: la Sociedad Argentina de Cultura (1947) – de la que dependieron cinco colegios universitarios – y el Círculo Santa Teresa del Niño Jesús para la formación de jóvenes universitarias.

Intuyendo la necesidad de una nueva forma de vida consagrada femenina al servicio de la Iglesia, en 1952 funda la Institución de las «Servidoras» , la cual, luego de su muerte, fue fuente inspiradora de un nuevo canon del Código de Derecho Canónico de 1983.

En 1953 crea el Colegio San Pablo para varones y más tarde, en 1969, el Colegio San Pablo para mujeres, actualmente Colegio Luis M. Etcheverry Boneo , en honor a su fundador.

Siempre en el ámbito de la evangelización de la cultura, crea en 1961 la Fundación Cultural Argentina en la estancia “La Armonía” (Cobo-Prov. de Bs. As.) como centro de espiritualidad, de encuentro, reflexión, formación y acción cultural.

En 1964 funda la Asociación Argentina de Cultura de la que hace depender su obra femenina de los Colegios universitarios al colegio primario y los Círculos de formación y acción.

El Padre Etcheverry dedicó su mayor tiempo y energía a la formación de las personas en quienes supo despertar el anhelo de santidad. Orientó muchas vocaciones sacerdotales y para la vida consagrada, y consciente de las necesidades de la época, se dedicó a la formación intensiva del laicado en distintas asociaciones, nucleando una amplia familia espiritual.

PadreLMEB

Transmitía siempre su alegría interior y su identificación creciente con Jesucristo. Inculcaba su amor a la Virgen, a la Iglesia, al Papa, a la Palabra de Dios, al Magisterio, educando a una profunda participación en la Liturgia y a confiar en la potencialidad de la gracia y en la fuerza de la oración. Fiel a su lema “Instaurar todas las cosas en Cristo” (Ef 1,10), encarnó en su persona y en su vida todo lo que enseñaba.

En viaje a Roma fue sorprendido por una grave enfermedad en Madrid y allí murió el 18 de marzo de 1971, tras ocho días de gran sufrimiento. Médicos, sacerdotes y religiosas que lo atendieron y visitaron calificaron su enfermedad y su muerte como un excepcional testimonio de santidad.

En 1997 se inició en el arzobispado de Buenos Aires el proceso diocesano de beatificación del Siervo de Dios Luis María Etcheverry Boneo.

Con motivo de los 40 años de su muerte se ha publicado recientemente una documentada biografía sobre la primera etapa de su vida: Ana O. Fernandez, El siervo de Dios Pbro. Luis María Etcheverry Boneo. Infancia y juventud. 1917-1943. Ediciones Servidoras – Asociación Cristo Sacerdote, Buenos Aires 2011.